Los exámenes de Cambridge son los certificados más reconocidos para avalar el nivel de inglés en el ámbito académico y profesional. Tras ellos hay un proceso de investigación y secretismo para no plagiarlos.
....durante todo el proceso y hasta que se abre el sobre del examen el día de la prueba, no se conoce su contenido. Se guarda celosamente y se evita cualquier tipo de filtración o posibilidad de que se pueda falsificar. De hecho, se imprimen directamente en una imprenta de la que no se facilita el nombre y el papel que se emplea contiene hilos de seguridad para comprobar su autenticidad. Además, cada examen se guarda en una bolsa herméticamente cerrada, que solo se abre el día de la prueba una vez todas las personas están en su sitio correspondiente y comienza el tiempo para hacer el examen.
Los exámenes se almacenan en las afueras de la ciudad de Cambridge, centro desde el que se realiza todo el proceso de envío de las pruebas a cada país. Unas instalaciones a las que no se permiten pasar ningún tipo de cámara o de móvil, entre otros objetos, para garantizar la privacidad. Además, todas las personas cuyo trabajo está vinculado con los exámenes mantienen un acuerdo de confidencialidad.
Los exámenes se almacenan en las afueras de la ciudad de Cambridge, centro desde el que se realiza todo el proceso de envío de las pruebas a cada país. Unas instalaciones a las que no se permiten pasar ningún tipo de cámara o de móvil, entre otros objetos, para garantizar la privacidad. Además, todas las personas cuyo trabajo está vinculado con los exámenes mantienen un acuerdo de confidencialidad.